El camino que a Dios le agrada
«El Señor dirige los pasos del hombre y lo pone en el camino que a él le agrada». Salmo 37: 23
SUPE QUE QUERÍA SER PASTOR a los once años de edad, pero mi deseo de servir al Señor encontró varios obstáculos en el camino. En una oportunidad, mientras me bañaba en un río, entré a una zona muy profunda y comencé a ahogarme. Gritaba pidiendo ayuda pero nadie venía en mi auxilio. En el momento en que supuse que todo estaba perdido, un amigo se lanzó al agua y me rescató.
Cuando llegó el tiempo de ingresar a la universidad surgió otro obstáculo: no contaba con los recursos necesarios para costear los estudios de Teología. Me ofrecieron cuatro becas para distintas universidades y carreras, pero ninguna de ellas era válida para la Universidad Adventista Dominicana. Rechacé las becas y como no tenía dinero para ingresar decidí colportar durante el verano. Gracias a Dios logré ingresar ese mismo año a la facultad de Teología. Dios me había colocado en el camino correcto, estaba contestado mis oraciones, pero entonces surgió otro obstáculo.
Mientras cursaba mis estudios universitarios sufrí un accidente que me dejó paralítico. Me llevaron de emergencia a la clínica, a duras penas podía articular palabras. Aquel día oré a Dios pidiendo un milagro. Cuando ya estaba fuera de peligro, llegaron las malas noticias: los médicos decían que no volvería a caminar. Sin embargo, Dios obró un milagro, contestó mis oraciones y las de todos los que intercedieron por mí y recuperé la movilidad. En ese momento comprendí que Dios tenía un plan para mi vida.
Cuando finalicé mi carrera recibí una invitación para ir a México y participar como misionero voluntario en One Year in Mision. Allí pude compartir el amor de Dios y las maravillas que él ha hecho en mi vida con muchas personas.
En cada etapa de mi vida he visto el cumplimiento de las promesas de Dios en mi vida. Aún me queda mucho por recorrer, pero sé que estoy en el camino que le agrada a Dios.
Hoy quiero invitarte a que permitas que el Señor dirija tus pasos y a transitar cada día por el camino que a Dios le agrada.
Ángel Luis Mercedes
República Dominicana.