Un Dios de milagros
«Porque todo el que es hijo de Dios vence al mundo. Y nuestra fe nos ha dado la victoria sobre el mundo». 1 Juan 5: 4
¿SABÍAS QUE TODO EL CIELO está interesado en la salvación de la raza humana? Al ver la conversión que el Espíritu ha obrado en la gente, nos damos cuenta de que no tenemos razón para dudar de que el Señor quiere ayudarnos en cada aspecto de nuestras vidas.
He tenido la oportunidad de predicar en diferentes lugares, uno de los más curiosos fue la comandancia policial de San Diego, Estado de Anzoátegui, Venezuela, lugar donde los hermanos imparten estudios bíblicos. Allí conocía una dama que estaba ansiosa de entregar su vida a Cristo Jesús. Después de conversar con ella, me dijo que el único día que podía bautizarse sería el sábado. «Este es el único día permitido para las visitas», me dijo. Así que oramos y nos despedimos.
Durante esa semana no dejé de orar por ella y el sábado fui con el hermano que predicaba en esa penitenciaría. Para nuestra sorpresa nos dimos cuenta que ese día la penitenciaria estaba cerrada. Contactamos a una hermana que mantenía comunicación con la joven y nos mencionó que la habían cambiado de estación policial. Cuando la ubicamos, nos informó que el siguiente lunes la regresarían a la estación de San Diego, y que quería ser bautizada.
El lunes cuando llegamos a la prisión me dijo: «Pastor no hay agua». En ese momento me desanimé, pero luego dije: «Dios, ayúdame a creer que obrarás un milagro». Me aferré a las promesas divinas y le dije al Señor: «Si me toca cargar agua lo haré».
Cuando llegué a la cárcel la dama me dijo: «Pastor, espere afuera, porque me dejarán salir para bautizarme». Luego salió con la encargada de la prisión, quien me preguntó: «¿Dónde tiene su vehículo? Cerca hay un río, vamos para que ella sea bautizada». No podía creer lo que había escuchado. Ese día, en un río, Dios me demostró que para él no hay nada imposible.
Hoy quizás estás viviendo una experiencia que te ha llevado a orar con fervor y pedir un milagro, si ese es tu caso te animo a confiar en el Dios de los milagros, él cumplirá sus promesas, yo lo he vivido y sé que es cierto.
Elder Rubio
Venezuela