TRABAJO
¿Has visto hombre solícito en su trabajo? Delante de los reyes estará, no estará delante de los de baja condición. Proverbios 22:29.
Mientras escribo esta reflexión pienso en el iPhone X, que utiliza el rostro del usuario como método de autenticación. Tal vez tú tengas uno. Una de las ventajas de este teléfono es que cada vez que intentes desbloquearlo, ya no tocarás un botón de inicio ni utilizarás tus huellas, porque el iPhone X analiza el rostro por medio de Face ID.
Así de adelantada está la ciencia.
El tiempo en que imaginábamos a un inventor como un hombre de cabellos blancos y alborotados, encerrado en su laboratorio, que a veces se olvida de comer y dormir, ha quedado atrás. Ahora, muchos jóvenes y aun niños están desarrollando nuevos aparatos y sistemas útiles para la humanidad. Estos inventos de adolescentes son prueba de ello:
Zapato cargador. Rajesh Adhikari, un estudiante indio de la escuela secundaria desarrolló un zapato que puede recargar la batería del teléfono móvil mientras caminas o corres.
Linterna de calor corporal. La niña Ann Mokosinsky inventó una linterna que funciona sin pilas, ya que se enciende con el calor del cuerpo.
Eyeboard. Luis Cruz, un hondureño de 17 años, desarrolló un sistema informático de mecanografía que se controla con el movimiento de los ojos.
Detector de cáncer. Con tan solo quince años, Jack Andraka creó un sistema para detectar el cáncer en cinco minutos.
Estos adolescentes produjeron sus inventos debido a su talento, pero sobre todo a su trabajo. Son célebres porque supieron combinar talento, estudio, conocimiento y trabajo. Al escribir esto me pregunto: ¿Cuántos jóvenes talentosos están sumidos en el anonimato porque no se esfuerzan? Descubre tus talentos, prepárate de acuerdo con el talento principal que Dios te ha concedido, estudia con dedicación y trabaja con denuedo. Pronto el mundo sabrá de ti; pronto el mundo será mejor, gracias a tu aporte.