ABSTEMIOS
“No bebas agua solamente. Deberías tomar un poco de vino por el bien de tu estómago, ya que te enfermas muy seguido” (1 Timoteo 5: 23, NTV).
Alcohólicos Anónimos, movimiento internacional de ayuda contra el alcoholismo, fue fundado en 1935 por William Griffith Wilson y Bob Smith, en Ohio, Estados Unidos. Consiste en comunidades de hombres y de mujeres que comparten su mutua experiencia, fortaleza y esperanza para resolver el problema común y ayudar a otros a recuperarse de esta adicción. Para la membresía, el único requisito es el deseo de abandonar la bebida. Es una asociación sin fines de lucro y sin afiliaciones a religiones o partidos políticos.
Alcohólicos Anónimos surgió en Akron el 10 de junio de 1935, en una reunión entre Bill W, corredor de bolsa de Nueva York, y Bob Smith, eminente cirujano de esa ciudad. Ambos tenían graves problemas de alcoholismo. Ese día, dos alcohólicos se reunieron para conseguir la sobriedad. Actualmente, hay alrededor de 116 000 grupos y más de 2 millones de miembros en el mundo que lograron su recuperación a través de esta comunidad.
Cuando Pablo aconsejó a Timoteo que tomase “un poco de vino por causa de tu estómago”, no estaba defendiendo la práctica de beber socialmente. Claramente, dice: “No tomes más agua”, dado que incluso hoy, en Medio Oriente, es muy difícil conseguir agua potable. Es totalmente evidente que el propósito de su consejo a Timoteo se refería al uso medicinal, no a un placer social.
¿Qué tipo de vino recomendó Pablo? ¿Se animaría el apóstol al uso moderado de una bebida de la que Proverbios 23:31 dice: “No mires al vino cuando rojea”, bebida que produce dolor, quejas, rencillas y heridas (Prov. 23:29); alborotadora (Prov. 20:1); que pervierte el juicio, que causa que se vean cosas extrañas y el corazón profiera perversidades (Prov. 2332,33)? ¡Obviamente, no!
Hoy, investigaciones científicas pretenden que tomar un vasito de vino por día beneficia el corazón. Sin embargo, también se ha comprobado que pueden obtenerse similares resultados con el jugo de uva sin fermentar, lo que evita todos los demás problemas de salud asociados con las bebidas alcohólicas.
Aunque un vaso de cerveza u otra bebida alcohólica, en un primer momento, podría parecer inofensivo, se ha descubierto que muchas personas tienen tendencias hereditarias o personalidades más predispuestas a la adicción, y un problema o una dificultad pueden desencadenar un serio caso de alcoholismo, si no nos regimos por el camino seguro de la abstención absoluta de bebidas alcohólicas.
Hoy, decide cuidar de tu cuerpo, tu familia y tu salud espiritual, alejándote de todo aquello que genere adicción y embote tu mente.