Miercoles 3 de Junio – EL POTENCIAL HUMANO – Devocional Adultos

EL POTENCIAL HUMANO

«Pues somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparo de antemano para que anduviéramos en ellas» (Efesios 2:10).

Uno de los grandes líderes de la psicología, promotor del desarrollo del potencial humano en los años sesenta, fue el psicólogo Abraham Maslow. Su trabajo preliminar consistió en estudiar la vida de algunas personas que, aparentemente, habían desarrollado el máximo de su potencial. Consideró la vida de Abraham Lincoln, Thomas Jefferson, Mahatma Gandhi, Albert Einstein, Eleanor Roosevelt, entre otros. A continuación, analizó aquellos aspectos que dichas personas tenían en común para determinar qué factores hacían a una persona realizada. Si bien identificó varias características, este grupo selecto compartía, principalmente, ciertos valores denominados democráticos. Son valores relacionados con el interés social, la solidaridad o la compasión por la humanidad. En otras palabras, compartían un interés por el prójimo que iba más allá de la mera teoría. Trabajaban y luchaban por ellos, eran verdaderos «servidores» del pueblo. De esta manera, el desarrollo del potencial humano se hizo factible, en la medida que se interesaron y sirvieron a la humanidad.

Eleanor Roosevelt, esposa del presidente de los Estados Unidos, Franklin Roosevelt, estaba profundamente involucrada en cuestiones de justicia social y de derechos humanos. Abogó por la igualdad de derechos para mujeres, afroamericanos, y trabajadores. Estaba convencida de que ayudar a los demás era un deber indiscutible. En una ocasión, renunció a ser miembro de un grupo de mujeres aristocráticas porque habían discriminado a una cantante de raza negra. Ellas habían impedido la actuación de Marian Anderson en el salón Constitution Hall, cuya capacidad máxima era de siete mil personas. En su lugar, Eleanor logró que el evento se trasladara al Lincoln Memorial (Monumento a Lincoln), ubicado en uno de los extremos del National Mall de Washington DC, donde el concierto fue oído por unas setenta y cinco mil personas. «Los derechos humanos comienzan cerca de nosotros», sostenía esta mujer, que fue llamada «Primera dama del mundo» por sus logros humanitarios a lo largo de toda su vida.

En su carta a los efesios, el apóstol Pablo señala que cada uno de nosotros ha sido creado en Cristo Jesús para buenas obras. Esto significa que somos creación de Dios y, por nuestra unión con Jesús, podemos vivir haciendo el bien. Ese es el propósito que da mayor sentido a la vida.

El desarrollo del potencial es posible en la medida que dediquemos nuestra vida al propósito para el cual hemos sido creados, a saber, realizar buenas obras. Descubre cuáles son esas obras que Dios tiene preparadas para ti a través de la ayuda que brindes a alguien que se encuentre muy cerca de ti.

Radio Adventista

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